NOVEDADES

Asanas: Flexiones anteriores

Las flexiones anteriores son asanas profundamente calmantes. Un ejemplo de estas, es la clásica postura de sentado ´Paschimottanasana´, postura de ´pinza´.

Estas asanas, no solo corrigen toda la cadena muscular posterior, sino que además, acompañado la postura con respiración abdominal, realiza un profundo masaje interno que estimula y armoniza el funcionamiento de los órganos del torso, especialmente del sistema digestivo y excretor. 

Conforme nos plegamos en nosotros mismos, la asana nos invita naturalmente a una auto-reflexión, que puede ser emocionalmente satisfactoria o difícil, depende de lo que surja. Otras flexiones, como Balasana (postura de niño) suelen ser profundamente agradables: estamos en esa posición durante los 9 meses de gestación y regresamos espontáneamente a esta posición fetal para “cuidarnos y protegernos”.
Mantener las flexiones anteriores durante al menos unos minutos, acompañado de una buena respiración permite explorar esos sentimientos de serenidad.

Además, al plegarnos hacia adelante estiramos y exponemos la parte posterior de nuestro cuerpo, pudiéndonos sentir vulnerables. Del mismo modo, del miedo a caer de espaldas en las flexiones posteriores, en las flexiones anteriores tendemos a sujetarnos de los músculos posteriores cuando nos plegamos hacia adelante como reacción inmediata.  

Para soltarnos del todo en una flexión anterior, debemos relajar toda la cadena muscular posterior, que comienza en la fascia plantar de los pies y avanza a través de los tendones de alquiles, en la parte inferior de las piernas, tendones y aductores en la parte posterior e interior de los muslos, así como los músculos glúteo mayor, piriforme y cuadrado lumbar, alrededor de la parte trasera de la pelvis y en la zona lumbar y en los músculos de toda la espalda, principalmente los erectores de la columna, multífido y dorsal ancho.

Alcanzar a soltarnos totalmente requiere paciencia mientras la cadena muscular posterior se va relajando. Nunca se debe realizar de forma brusca y con el cuerpo en frío, ya que se podrían producir lesiones, de manera que el cuerpo debe estar caliente y despierto. Por ejemplo, realizar posturas como Trikonasana (postura del triángulo), Ardha Chandrasana (postura de media luna) y Parsvattanasana (postura de estiramiento profundo de piernas) son estupendos para calentar y soltar los tendones como preparación para estiramientos más profundos en flexiones anteriores de sentado.

Resulta ideal hacer flexiones anteriores, alternando con abridores de caderas y torsiones de columna. Los abridores de cadera tenderán a generar calma profunda, mientras que las torsiones serán estimulantes.

Siempre, tras realizar flexiones anteriores profundas se deben realizar flexiones posteriores (arcos) como por ejemplo, la postura del Puente, a modo de contrapostura para reintegrar los tendones y contraer la cadena muscular posterior; y torsiones, para reintegrar la columna.